La escuela Chaca y su incansable búsqueda de donantes

Los alumnos de séptimo grado de la escuela Dionisio Chaca de Tupungato no descansan. Se han propuesto movilizar a su comunidad para comprometer a los vecinos en la donación de médula ósea y van por buen camino. El 30 de mayo pasado, celebraron el haber conseguido que 50 tupungatinos se convirtieran en potenciales dadores. Ahora están en plena campaña para realizar otro registro masivo el 4 de setiembre.

Con el entusiasmo que inyecta la juventud y un fuerte compromiso con los enfermos de leucemia, estos alumnos han salido al aire en las FM locales promoviendo la iniciativa. Además, han empapelado la ciudad valletana con carteles que invitan a tomar conciencia sobre la posibilidad que tenemos todos de salvar una vida.

También, semanas atrás visitaron la Legislatura provincial para convencer a sus miembros de la importancia de esta campaña y aprovecharon para conseguir adhesiones caminando de punta a punta la plaza Independencia y la Peatonal Sarmiento, que para algunos era la primera vez en que la pisaban.

‘Registrate Tupungato’ es un proyecto escolar que la escuela Chaca lleva a cabo junto a la organización provincial ‘Hagamos algo por los chicos con leucemia’.  Los resultados a nivel pedagógico y social han sido tan positivos, que el proyecto está siendo evaluado por las autoridades de la Dirección General de Escuelas.

“Nuestro sueño es que esta misma movida solidaria se replique en otros departamentos”, comentó Carolina Salinas, la maestra que lidera el proyecto y también es responsable de territorialización de la asociación civil. La idea es que todo el Valle de Uco se contagie con esta experiencia. De allí, que los tupungatinos ya han mantenido reuniones con referentes educativos de Tunuyán y San Carlos.

Sin pensarlo, esta iniciativa que nació en un aula se ha convertido en la bandera de lucha de todas las asociaciones civiles del departamento e incluso, desde su visita a Mendoza, también se transformó en una meta de promoción para Juan Carr y su Red Solidaria nacional.

Pequeños grandes solidarios

“La gente tiene miedo a la donación de médula porque piensa que es muy invasiva, pero es como si te sacaran sangre por un brazo y te la devuelven por el otro. No es nada grave”, explicó con una seguridad admirable, Maximiliano Torres. A sus doce años, el chico es un experto en la materia y ha aprendido a respetar y valorar la lucha que llevan adelante quienes luchan contra la leucemia.

“Yo sabía algo, pero la seño Caro nos explicó, y todos nos interesamos por saber más de la enfermedad”, contó Maxi, quien fue uno de los estudiantes de séptimo grado A que habló por la radio para convocar a posibles donantes. Dice que espera ser grande para dar sangre y registrarse en el banco internacional de donantes de médula ósea. Su familia también acompaña este compromiso, alentando sus acciones y colaborando con alimentos para los pacientes que sufren necesidades.

La próxima salida masiva desde Tupungato para registrarse como donantes en el área de Hemoterapia del hospital Central será el 4 de setiembre. El compromiso se da en cadena: los chicos promocionan, los voluntarios ya integran una extensa lista y el municipio brinda la movilidad para que estos 50 pasajeros solidarios lleguen a destino.