Emociones que sanan o enferman

¿Cuántas veces nos preguntamos por qué tal o cual persona que no tenía antecedentes o predisposición,
desarrolló una enfermedad tan compleja como el cáncer que acabó rápidamente con ella? Según las investigaciones científicas de este método, la hipertensión arterial, la diabetes, las enfermedades  autoinmunes como la esclerosis múltiple hasta el cáncer, encuentran causas emocionales y códigos biológicos comunes en quienes se encuentran afectados por ellas, que pueden ser reversibles.

· La biodescodificación está demostrando que, más que determinados por nuestros genes, lo estamos por otros factores como: · La herencia de conflictos y traumas irresueltos por nuestros antepasados: padres, abuelos y bisabuelos, lo que se conoce como conflictos transgeneracionales.

· El “proyecto sentido” que nuestros padres conciente o inconcientemente tuvieron para nosotros el tiempo previo a nuestra concepción, y durante el transcurso de los nueve meses de nuestro desarrollo en el seno materno. Estamos determinados por ese “sentido” que tuvo nuestra llegada al mundo.

· Los propios conflictos irresueltos que vamos acarreando a lo largo de nuestro desarrollo, y que tienden a quedar ocultos o velados a nuestra conciencia de acuerdo al tenor de emociones que nos hayan causado.

¿Cómo se origina el método?

Una de las fuentes del origen de la biodescodificación es la nueva medicina germánica de los años 80 del doctor Ryke Geerd Hamer.

Desde ese período reciente a la época actual, varios científicos en Francia, Austria y España han continuado investigando sus alcances como método complementario de la medicina en la detección, tratamiento y cura de enfermedades. Entre ellos, Enric Corbera, terapeuta español, él más conocido en América y el que más ha difundido sus beneficios en los últimos años.

En Cuba, a través del trabajo realizado por Corbera junto con profesionales de ese país, la  biodescodificación está integrada a la salud pública, se lleva a cabo en los hospitales y los registros, experiencias e investigaciones obtenidas, están causando una verdadera revolución en el ámbito de la psiquiatría mundial.

Perú es otro de los países en Latinoamérica que ha abordado la investigación de enfermedades a través de la biodescodificación. Mientras que, en Argentina ya existen Centros en donde se imparte la formación en el método, como Rosario y Buenos Aires.

La doctora Marisa Jofré, mendocina y médica de familia ha realizado un post grado en  psiconeuroinmunoendocrinología en Rosario bajo el enfoque de la biodescodificación. Luis Martín, ingeniero de profesión y mendocino, se ha formado como biodescodificador y programador neurolinguístico, una de las técnicas que utiliza el método, que ambos, en conjunto, han traído a Mendoza. Como médica, Marisa realiza un chequeo riguroso y profundo de la salud clínica de cada paciente luego, de acuerdo a la patología presente, lo deriva a Luis quien aborda el caso desde las técnicas de la biodescodificación, juntos coordinan el acompañamiento de su evolución.

“Desde los síntomas vamos hacia atrás, vemos cuáles son los códigos biológicos que generan, y cuando los detectamos podemos saber cuál es la “zona oculta” de la enfermedad a la cual, al paciente, le cuesta acceder ya sea porque no la conoce o porque no puede hacerlo por cuenta propia.

Pnl e hipnosis, técnicas utiizadas

"No es yendo hacia nuestra luz que seremos luminosos, sino aceptando sumergirnos en nuestra
oscuridad". Para lograr acceder a la zona de las emociones ocultas, de la "sombra", como la llama Carl Jung, se utilizan técnicas diversas como la PNL, programación neurolingüística. PNL apareció en los años 50 como una técnica cuyo postulado es que todos respondemos a programas regidos por pautas familiares, sociales y culturales.

Estos programas se evidencian a través del lenguaje verbal pero mayormente gestual ya que el lenguaje hablado corresponde solo al 7 % de todo lo que decimos. A grandes rasgos, “si como individuos desarrolláramos nuestra capacidad de “reprogramarnos” mentalmente para expresar eficientemente nuestras emociones sin reprimirlas u ocultarla, podríamos modelar nuestras vidas de forma tal que lograríamos mayor bienestar”. Por otro lado, “en estado de alerta de vigilia no siempre podemos acceder al inconsciente, por lo que el biodescoficador utiliza técnicas para llegar a un estado de conciencia de hipoalerta, hipoactividad o hipo vigilancia como se le llama, que habilitan el acceso mediante la relajación o la respiración, no solo a través de la hipnosis, ya que hay personas que le tienen temor a esa técnica”, comenta Luis.

La enfermedad es reversible

Desde un juanete o un callo plantal hasta una enfermedad de gran complejidad pueden decirnos algo de nuestra relación con los demás. Niños que desarrollan otitis o conjuntivitis a repetición están manifestando un conflicto en su relación con mamá o papá. Hasta los doce años, el niño expresa principalmente los conflictos de la madre. La gordura y posterior obesidad infantil que se ha extendido en los últimos años, y que se evidencia en niños a partir de los cuatro años, es un síntoma del sentimiento de abandono que  puede percibirse en la infancia debido a múltiples factores de relación familiar. A grandes rasgos, la  diabetes infantil y adulta habla de la resistencia a algo o a alguien, está relacionada a la carencia de afecto, el broncoespasmo, a la amenaza de territorio, la fibromialgia es la enfermedad de las fibras familiares, las esclerosis y enfermedades autoinmunes en general tienen relación con conflictos  transgeneracionales, de direccionamiento en la vida. Según Marisa, “el factor determinante es como percibe la persona su situación. Si soy coherente con lo que pienso, digo y hago tengo mucho más por ganar en el terreno de la salud que si no hago caso a mis emociones, me reprimo, me obligo a sentir o a expresar de una manera diferente por una cuestión social, política o cultural”.

La biodescodificación no es una terapia, es un método que busca despertar una escucha biológica del cuerpo, descubrir los códigos que hay detrás de los síntomas de cada enfermedad. Los conflictos siempre van acompañados de las emociones que se ponen en juego, si en lugar de expresarlas las reprimimos por diferentes motivos, por una mayor aceptación social, por creencias religiosas, culturales, políticas, con el tiempo activarán diversos códigos biológicos en forma de enfermedad.

Ejemplo es el caso de un hombre que llegó al consultorio con dolor de rodillas. "Sabemos que las rodillas tienen que ver con la sumisión, sumisión a otro u otros. Y en biodescodificación el sistema osteoarticular guarda relación con cuatro códigos: impotencia, desvalorización, resultado obligatorio, respeto. De partida, ya sabíamos que esa persona se estaba sometiendo frente a otros, en una situación de relación, en donde estaba en juego su valoración personal, estaba obligado y sentía que le estaban faltando el respeto a sus creencias, a su forma de ser, a lo que él quería. El dolor había comenzado tres antes meses, el mismo tiempo en el que había traído a su madre a vivir en su casa con su familia. Él solo se había permitido expresar la emoción políticamente correcta, "tengo a mi madre en casa, es mayor, cómo no voy a cuidar de ella". Mientras que no se permitía sentir el agobio por el conflicto que esta decisión había generado en
la armonía de su hogar…

Hay otras soluciones posibles, antes que adoptar una actitud de sumisión frente a la situación. Cuando cambia la emoción, el código se desactiva y desaparece el dolor.

Asesoró: Medicina y Biodescodificacion SOFÍA "Salud Consciente".