El rodaje de Zama pasó por Corrientes

Con la discreción característica de la directora salteña, que se refleja en los miembros de su equipo, las noticias sobre la filmación de "Zama" aparecen cada tanto y en dosis homeopáticas. Sólo se sabía por ahora que el rodaje se inició en mayo, con un plan que los llevará por Formosa, Provincia de Buenos Aires y Corrientes.

Destellos de la idea del proyecto ya se vislumbraba desde 2013, siete años después del aniversario número veinte del fallecimiento del mendocino Antonio Di Benedetto y medio siglo de la publicación de la novela más elogiada del escritor local.

No obstante, algunos medios de Corrientes publicaron ayer el movimiento del equipo de "Zama" en la localidad de Empedrado, al margen oriental del río Paraná, a pocos kilómetros de la capital, aunque sin dar detalles sobre qué parte de la historia de la novela involucraba aquel paisaje.

La entrega de información  con mínimos detalles parece ser la estrategia de prensa del proyecto de Martel, casi sin primicias ni revelaciones, ni mucho menos con tránsito de fotos del backstage. Todo el proceso orbita dentro de una cápsula blindada que protege cada paso de la filmación.

¿Este búnker que rodea el largometraje servirá para aumentar las expectativas de los espectadores? Veremos.

Por lo pronto, "Zama" tiene fecha de estreno para algún momento de 2016, ya que Martel se toma pacientemente su tiempo para la post producción y es muy meticulosa en la edición del sonido y de la imagen. El guión solo le demoró al menos dos años de escritura, tomando en cuenta además que pasaron siete largos años de su anterior filme, "La mujer sin cabeza".

Filmar en el Litoral

Esta es la primera cinta de época de la realizadora de "La Ciénaga", utilizando un paisaje litoraleño en un contexto colonial. (A finales del siglo XVIII, don Diego de Zama, un funcionario de la corona española, espera en un puesto de frontera pacientemente recibir el traslado a Buenos Aires, mientras su vida se vuelve tedio y desesperación).

La misma Martel afirmó en su última entrevista con Clarín, que una de las cosas que más le había seducido de la novela de Di Benedetto era esa idea de libertad total que te brinda la pérdida de identidad, la de convertirse en un extraño.

Este es el corazón emocional del relato que en la novela transcurre en la zona conocida como el Gran Chaco Gualamba. 
En esencia, tanto el diseño de producción como el elenco internacional, tiene algo de lo hecho en la Patagonia por Lisandro Alonso en "Jauja".

El protagonista, Diego de Zama es el actor español radicado en México Daniel Giménez Cacho al que suma otra compatriota,  Lola Dueñas y los argentinos Juan Minujín, Rafael Spregelburd, Daniel Veronese y Vando Villamil.

El film es una gran co producción entre Argentina, Brasil y otros países, con un flujo de dinero proveniente de la productora de los hermanos Almodóvar, El Deseo, también involucrados en la taquillera "Relatos salvajes" de Damián Szifrón.