Camila, de Lavalle: Coronada el día de su cumpleaños

Camila Sol Morales (20) recibió ayer el mejor regalo de cumpleaños que una joven puede pedir: resultó electa reina departamental de su querido Lavalle.

Pero recién luego de pasar la noche en un hotel y asistir a un evento al que la convocaron, pudo soplar las velitas junto a sus familiares y amigos; momento que también compartió con los cronistas de Los Andes. En su hogar primaba un ambiente de celebración y alegría, pero sobre todo satisfacción por un logro fruto del esfuerzo compartido.

“Tenía una gran hinchada que estaba en todos los eventos a los que asistí, cada vez que llegaba y veía todos los carteles me salían lágrimas de la emoción”, contó la soberana.

Su ilusión de reina comenzó en 2013 cuando una mujer le planteó la idea, pero ella decidió esperar para estar más preparada. Así fue como a mitad de 2014 fue convocada por  la comisión directiva del club El Chilcal.

“No queríamos que se nos escapara”, señaló Jeremías Blanco, el primero que la contactó. Como para su mamá Jaquelina se trataba de una decisión muy importante, le pidió que lo pensara bien.

“Le dije que iba a tener que ser muy fuerte pero que si estaba decidida le diera para adelante”, recordó. Así fue como tanto ella, como su papá Miguel, sus hermanos Betiana (28), María José (26) e Ivo (14) la acompañaron en cada paso. “Ahora estamos sumamente felices, no lo podemos creer, es un gran orgullo que represente a Lavalle”, remarcó la madre.

Para ella, Camila es una joven que los sorprende a cada rato. “Tiene mucha frescura, es muy dulce, compañera y tiene muchos amigos”, la describió la mujer. Mientras que su papá se mostró muy honrado de que la menor de sus hijas sea portadora de la corona. “Es una alegría inmensa y muy merecida porque trabajó mucho para lograrlo”, afirmó.

Lo que destacó su hermana María José es el carácter de luchadora de la reina. “Todo lo que se propone lo consigue, eso es lo que más admiro de ella”, expuso notablemente emocionada.

Al lado de la representante lavallina también se encontraba su sobrina postiza Nahiara Navarrete (5) con una corona similar a la de su tía pero de plástico. “Cuando sea grande también quiero ser reina”, manifestó la pequeña admirada por la flamante soberana.

Estilista y futura periodista 
Con dos oficios ya aprendidos y una carrera por delante, Camila tiene muy claro lo que quiere para su futuro. "Voy a estudiar periodismo en la Universidad Maza", relató a quien le encantaría trabajar en la televisión. "Aunque durante la campaña fuimos varias veces a la radio y también le encontré el gustito", recalcó.

Previamente la chica realizó un curso de estilista y otro de manicura. “Me gusta mucho resaltar la belleza de la mujer”, comentó la joven que se dedicó todo el año pasado a esas tareas. “Cuando mis amigas tienen una fiesta vienen a mi casa para que las peine y a mí me encanta”, relató.  En su tiempo libre la reina disfruta de ver obras de teatro, estar con su familia y sus amigos.

“Aprovecho mucho para estar con la gente que quiero”, remarcó. Durante la noche de su elección Camila estaba tranquila, pero cuando comenzó a ver que sus compañeras la abrazaban y felicitaban, no pudo contener el llanto. “Fue una felicidad muy grande”, recalcó. Junto a las chicas, que desde ayer forman la corte real, tiene pensado trabajar en un proyecto solidario.

Como reina de Lavalle le encantaría desempeñarse como embajadora social y cultural del departamento. “Quiero dar a conocer lo mejor de mi pueblo”, aseguró.

Si bien su familia no cuenta con un largo historial real, sí cuentan con una majestad de quien seguir los pasos. “Mi abuela fue reina de la tercera edad, representó al Pami y fue electa por la provincia”, destacó la chica.

“¿Reina nacional? No sé. Todavía no me imagino, prefiero ir paso a paso”, cerró Camila.

Emotivo espectáculo

El espectáculo artístico destacó el protagonismo del ser viviente más antiguo de Lavalle, el Algarrobo Histórico, como el principal testigo de la historia de los lavallinos. El añoso árbol ha cobijado con sus ramas y su sombra las desdichas y los logros compartidos que ha alcanzado el pueblo.

El argumento mostró, a través de la temporización de las cuatro estaciones del año, el transcurrir de la vida en este departamento, reflejando sus labores cotidianas, sus fiestas y encuentros en comunidad.

Muchísimos aplausos se llevó el cuadro ecuestre que representó al General San Martín a lo largo de su vida. Posteriormente, ocurrió lo propio cuando apareció el Papa Francisco, en una imagen proyectada en la pantalla led, en el centro del escenario.

Las escenas resaltaron los avances y transformaciones del progreso que manifiesta hoy Lavalle, gracias el trabajo integrado entre instituciones públicas, privadas y los propios vecinos inquietos por el desarrollo.

Fue un espectáculo agradable a la vista, con el escenario bien utilizado en sus espacios, música acorde a cada uno de los cuadros y fueron pertinentes los fuegos artificiales. Por momentos, tuvo grandes cargas de emotividad que fue recibido con el público con aplausos cerrados.