Califican como histórica la reforma penitenciaria que encara Vidal en Buenos Aires

El Ejecutivo bonaerense decidió intervenir el Servicio Penitenciario y pasar a retiro y disponibilidad a 132 agentes. Civiles, a la cabeza.

El ministro de Justicia de la provincia de Buenos Aires, Gustavo Ferrari, destacó hoy que "en democracia nunca hubo una reforma" del Servicio Penitenciario bonaerense como la que está encarando la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal, quien anunció la intervención del organismo y el pase a retiro y disponibilidad de 132 agentes.

"En democracia nunca hubo una reforma del Servicio Penitenciario como la encarada por la gobernadora María Eugenia Vidal, que está dando un paso determinando en la lucha contra todas las mafias y todas las corrupciones", remarcó hoy Ferrari en declaraciones a radio Mitre.

En ese marco, explicó que la mandataria bonaerense "ha resuelto integrar al Sistema Penitenciario al plan de seguridad de la provincia", y afirmó que "el sistema carcelario provoca lo que ocurre hoy en la provincia, que casi el 50 por ciento de las personas que pasaron por las cárceles, reingresan y la cárcel se transforma en un intervalo entre dos delitos".

El ministro explicó que "no sólo hay un problema de infraestructura por un atraso de más de 100 años en la construcción de cárceles", sino que además el sistema "está estructurado sobre la base de una ley de la dictadura".

Además, señaló que se impulsa un cambio en las "exigencias de ingreso" de los agentes penitenciarios, ya que "hasta hoy para ser agente se exige el primario nada más y ahora queremos establecer un sistema de concursos".

"Hoy la misma persona que se encarga de la seguridad en el penal es el que tiene que encargarse de asistir, tratar y contener al interno. No está preparado. Así, entonces, nos está yendo. Ahora queremos dividir la seguridad y, por otro lado, la asistencia y tratamiento" del interno, explicó el ministro.

La reforma

El gobierno de la provincia de Buenos Aires anunció ayer una "transformación integral y profunda por primera vez en democracia" del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB) para, entre otras cosas, terminar con su "autogobierno", y dijo que forma parte de una "mirada integral" para mejorar la seguridad.

El anuncio fue formulado en La Plata, durante una conferencia de prensa que ofrecieron la gobernadora María Eugenia Vidal y el ministro de Justicia bonaerense, Gustavo Ferrari, luego de que decidieran el descabezamiento de la cúpula de la institución.

Vidal advirtió que "se terminó" el "autogobierno" de las fuerzas de seguridad y el Servicio Penitenciario Bonaerense y subrayó que la reforma es "mucho más profunda" que el relevo de 132 oficiales del SPB y su virtual intervención a cargo del ex fiscal federal de La Pampa Juan Baric.

"Trabajar por la seguridad de los vecinos, pelear contra mafias, el narcotráfico y el juego clandestino es pelear también contra corrupción y mal funcionamiento de estas fuerzas de seguridad", aseveró Vidal.

Por su parte, Ferrari detalló que la propuesta implica una "transformación integral y profunda por primera vez en democracia" del SPB, en el marco de una "mirada integral" sobre la seguridad que abarca "la inclusión social, la ley y la justicia, además de la policía y el sistema carcelario".

El ministro admitió que estos cambios pueden generar "reacciones" dentro del SPB, pero aseguró que en el gobierno están "preparados con la acción de la justicia", pero "también internamente" a través del fortalecimiento del "sistema de seguridad" en el esquema carcelario.

Los cambios implicarán el "reemplazo de los cinco directores y cinco subdirectores" del SPB y "pasar a retiro o a disponibilidad 132 oficiales del Servicio", precisó Ferrari.

En ese sentido, dijo que será enviado a la Legislatura, "a la espera de que los bloques puedan hacer sus aportes, un nuevo Estatuto del SPB", ya que el actual "está vigente desde 1980 por lo que será el reemplazo de una ley de la dictadura", destacó.

Esto permitirá, manifestó, que el personal tenga "exigencias que superarán ampliamente a lo que hoy se tiene en cuanto a la carrera" penitenciaria, con la incorporación de "concursos" para el ingreso y los ascensos, y la "incorporación de una mirada desde los derechos humanos".

Se producirá un "recambio de la estructura de autoridades" por un plazo de 90 días, quienes serán "reemplazados por personal civil", en tanto que "la jefatura estará a cargo de uno de nuestros secretarios", precisó.

Al término de ese plazo los nuevos jefes "serán evaluados en cuanto a su desempeño" para determinar su continuidad o reemplazo.

Un organismo nuevo, agregó, "se hará cargo del control de gestión y la auditoria de todos los procesos e insumos" de los "12 complejos y 55 unidades" carcelarias de la provincia.

El segundo eje de la reforma es la "reinserción de los internos" con el objetivo de "procurar resolver la problemática gravísima" que significa que "casi el 43 por ciento de las personas que salen del SPB vuelven a ingresar".

Esto significará "un nuevo trabajo sobre la educación y el trabajo en las cárceles" con ayuda de la Nación, remarcó.

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