“Café solidario”: muchos lo pagan, pocos se lo toman

La iniciativa suma este año 80 bares y minimarkets en la provincia. Pero aún no prendió entre los beneficiarios.

Amaneceres tardíos bajo cero y abrigos que no parecen ser nunca suficientes son sólo algunas de las postales de estos días de pleno invierno en Mendoza. Y si bien los meteorólogos coinciden en que la estación más fría del año será menos impiadosa este año, las bajas temperaturas dirán presente -como siempre- en estos meses. En este contexto es donde más urge la solidaridad, en especial con quienes menos tienen.

Apelando a este sentimiento, desde hace 2 semanas se retomó el programa oficial "Café solidario" (antes llamado "Café pendiente"), una iniciativa en la que un cliente puede dejar pagado un café a cuenta -generalmente acompañado de tortitas o medialunas- para que otra persona sin recursos propios para poder comprarlo por sus medios pueda disfrutarlo.

Y -por qué no- hasta cambiarle su día, por más mínima que parezca la acción solidaria.

Si bien son muchos los mendocinos que han comenzado a dejar infusiones pagadas pagadas para que se las beba alguien con necesidad de calor, aún son pocos los que se acercan a preguntar si hay algún café disponible. "Desde el 15 de junio hasta el momento han venido personas que han pagado 4 cafés. Pero todavía no viene nadie a buscarlos.

Quizás mucha gente no se ha enterado todavía y, aprovechando que está la Plaza Independencia enfrente, yo les he dicho a algunos cuidacoches que si ven a las personas que duermen en la plaza les avisen que vengan a preguntar acá por un café", explicó Martín Bucca, quien atiende el minimarket de calle Espejo 271 (Ciudad).

“El año pasado, durante los primeros días pasó lo mismo: era más la gente que los dejaba pagos que aquellos que los consumían. Pero después se corrió la voz. Ojalá este año pase lo mismo”, sintetizó Belén, del café Cuarto Intermedio (Patricias Mendocinas 1183, también frente a la plaza Independencia). Hasta ayer al mediodía, en el lugar había un café pago que nadie había pedido.

Al igual que el año pasado, en este invierno 2017 el programa está articulado por el Instituto de Desarrollo Comercial (IDC) y ya se han adherido 80 locales en 7 departamentos, casi el triple de los 30 que se sumaron el año pasado. En 2016 se compraron 1.300 cafés pendientes y la expectativa de este año es superar ampliamente esa cifra.

A correr la voz

La iniciativa del "Café solidario" ya se ha convertido en una tradición para los días de bajas temperaturas en Europa, y desde hace algunos años la costumbre se importó en Mendoza. Según destacaron desde el IDC, con este programa se busca impulsar la responsabilidad social empresaria ayudando a quienes más lo necesitan. "Cuando el consumidor llega al local adherido al programa, podrá abonar una o más infusiones que quedarán en carácter de 'pendientes' para quienes no puedan abonarlas", explicó el gerente general del IDC, Daniel Dimartino.

La primera parte del objetivo viene siendo exitosa: son muchos los mendocinos que se suman y compran un café que ellos no toman. "Es relativo, pero por día se dejan pagos 1 o 2 cafés. Nosotros además le damos a la gente -al final de cada día- la mercadería que nos quedó también. Generalmente no vienen, pero como nosotros conocemos a esas personas que pasan todos los días y sabemos que no tienen recursos para comprar y necesitan tomar algo, les avisamos que pueden tomar un café", indicó Matías Clementi, del café La Espiga Mágica (Amigorena, entre San Martín y Primitivo de la Reta, de Ciudad). 

“Me parece perfecto que se hagan estas cosas, de ayudar a los que menos tienen. Ni hablar con este frío”, agregó el comerciante. Allí el café que más se vende como solidario -cada persona puede elegir el que quiera comprar- es el simple, de 15 pesos.

La segunda parte de la acción, la que consiste en que otra persona disfrute de ese café sin costo alguno para su bolsillo, es la que no termina de engranar aún. "Mucha gente no lo sabe aún. Por ejemplo, esta mañana pasó una señora a quien se la veía carenciada y salimos a avisarle que había un café que podía tomar si quería. Creo que el año pasado la gente estaba más al tanto, aunque tal vez es porque recién está empezando ahora. Pero lo que sí es destacable es cómo colabora la gente y compra café", destacó durante la mañana de ayer Beatriz, del café Al' Chamie (Garibaldi y Rioja). Aquí el más pedido es el café con leche grande y una tortita (45 pesos). "Es muy oportuna la iniciativa, sobre todo con el frío", opinó la mujer.

A diferencia del año pasado, en esta ocasión se han sumado también minimarkets. “Muchos no vienen a buscar, y es muy difícil a veces porque es gente que no tiene cómo enterarse, a no ser que les avisen los demás. Y la mayoría de los que compran lo hacen desinteresadamente, muchos ni quieren firmar un papel como para que quede constancia de que ese café está pagado”, destacó Martín, del mencionado drugstore de Espejo 271.

“A veces la gente paga el café y la tortita corre por mi cuenta. Estaría bueno que se repartan panfletos en la calle contando del programa y avisándole a la gente dónde puede tomar un café”, cerró.

Cómo adherirse

Los locales que participan del “Café solidario” tienen un sticker adherido en puertas y vidrieras para que la gente pueda identificarlos, así como también un listado con las bebidas pendientes disponibles.

Ya son 80 los comercios que participan en Ciudad, Godoy Cruz, Luján, Tunuyán, General Alvear y Malargüe, pero la convocatoria sigue abierta. Los interesados en formar parte de la iniciativa pueden solicitar que se los incluya en la lista llamando al 4230093 o enviando un mail a info@idc.org.ar

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